17 Julio 2019

La ley del más fuerte

Publicado en Deportes

El Rayo Vallecano sube los precios de los abonos y los aficionados responden con un boicot

Antonio Luquero | Vallecasweb
El Rayo Vallecano no para de generar “buenas” noticias. El anuncio del Club de subir de manera sustancial el precio de los abonos para la próxima temporada ha sido respondido por los aficionados con una campaña de boicot que hasta la fecha ha dado buenos resultados.

Las noticias son buenas o malas dependiendo del cristal con el que queramos mirarlas. Por ejemplo, el Rayo Vallecano ha anunciado el incremento del precio de los abonos para la próxima temporada con subidas que llegan a superar, en más de un 50 por ciento, el precio de los abonos de la campaña anterior. La noticia, que podría parecer mala a ojos del aficionado común, es buena para el Club, que incrementaría sus ingresos en cerca de 750.000 euros por este concepto siempre y cuando se llegara a la cifra de 10.000 abonados. Y eso sin contar con los abonos para ver al Rayo Femenino, una nueva modalidad que el Club se ha sacado de la manga y cuya aceptación ha sido más bien mala, por decir algo….

Sin embargo, lo bueno y lo malo no son siempre lo que parecen. Otro ejemplo, el boicot convocado por los aficionados del Rayo Vallecano como respuesta al incremento del precio de los abonos está teniendo una respuesta más que aceptable: un 33 por ciento de los antiguos abonados ha decidido no renovar su abono por el momento. Una buena noticia para los convocantes pero ¿mala para el Club? Tal vez no tanto…

El presidente del Rayo Vallecano siempre ha declarado que los actos de protesta contra su persona están protagonizados por “una minoría de aficionados”, por lo general muy activa en las redes sociales, dando a entender que el resto de seguidores aprueba su gestión. Convertido en datos, esa minoría estaría formada por unos 3.000 abonados, contando con los integrantes de Bukaneros, las peñas asociadas a la Federación de Peñas y miembros de la Plataforma ADRV.

Si estos 3.000 seguidores decidieran finalmente no abonarse, el Club dejaría de ingresar 600.000 euros. ¿Una cifra inasumible para el Rayo Vallecano? Pues tal vez no tanto. Teniendo en cuenta los más de 50 millones de euros ingresados por distintos conceptos en la temporada anterior, y los alrededor de 15 millones de euros que el Club recibirá esta temporada en concepto de seguro de descenso, no cabe duda de que el Rayo Vallecano es un Club “rico” al que esos 600.000 euros no le supondrían una pérdida inasumible. Es más, podría verse como un alivio que los aficionados más “rebeldes” decidieran finalmente no renovar su abono.



Como estamos inmersos en una guerra sin cuartel en la que los vaivenes y las estrategias pueden resultar imprevisibles, podríamos encontrarnos con escenarios de lo más dispar e inverosímil. Si nos situamos en el caso extremo de que comenzara la temporada con el boicot de los abonos llevado a rajatabla y el número de abonados no superando los 7.000 ¿qué pasaría entonces? Pues posiblemente nada, porque el Club podría activar otros planes alternativos ya puestos en marcha por otros clubes, como por ejemplo “maquillar” el aspecto de los gradas del Fondo llenándolas con personas de colectivos desfavorecidos a los que se les regalase entradas; obligar a los jugadores de la cantera y Fundación y a sus familiares a acudir a los encuentros; o en el caso más extremo pagar a “extras” para que ocuparan las gradas como ocurre en muchos programas de televisión. “Cosas veredes, amigo Sancho, que no creyeres”, ya lo vaticinó Don Quijote.

En este enfrentamiento sin cuartel entre el Rayo Vallecano y sus aficionados mejor organizados aún nos quedan muchas batallas por ver, porque la guerra, que ya ha trascendido a lo personal, nunca irá a menos, sino a más. Por eso no sería de extrañar que el Club diera por bien empleado el que 3.000 aficionados “rebeldes” no volvieran a renovar su abono, pese al daño aparente económico, a cambio de lograr la paz social dentro del estadio en cada uno de los encuentros que se disputen en Vallecas.

El apabullante 97,6 por ciento de las acciones representadas por Raúl Martín Presa se enfrenta, en la batalla más dura, contra el sentimiento persistente y correoso de unos cuantos miles de rayistas que no están dispuestos a dar su brazo a torcer. Si el dinero y la pasión nunca fueron buenos compañeros de viaje, entre el Rayo Vallecano y sus aficionados se barrunta un choque de trenes de consecuencias imprevisibles. Y ojo, porque en Vallecas el convoy aparentemente más fuerte suele terminar, más tarde o más temprano, descarrilando.

(*) En la imagen que abre esta información, Raúl Martín Presa habla con los periodistas durante el apagón producido en el Estadio de Vallecas el 23 de septiembre de 2012. Aquella noche, en la previa del partido que iban a disputar Rayo Vallecano y Real Madrid, comenzó un enfrentamiento entre directiva y aficionados que dura hasta nuestros días. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

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