28 Mayo 2014

El Rayo cumple 90 años

Publicado en Deportes, Reportajes

Fundado en Vallecas el 29 de mayo de 1924

Juan Jiménez Mancha | Vallecasweb
El 29 de mayo de 1924, también jueves como en 2014, hacia las seis de la tarde, un grupo de chavales cuyas edades oscilaban entre los 12 y los 16 años se reunían junto a varias personas más mayores y constituían la Agrupación Deportiva El Rayo, desde 1947 Agrupación Deportiva Rayo Vallecano. La reunión tuvo lugar en la calle Nuestra Señora del Carmen nº 28, conocida por el nombre más corto de calle del Carmen, hoy Puerto del Monasterio nº 8, en la casa de Prudencia Priego, de 54 años de edad, viuda de Julián Huerta.


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(*) En la imagen superior: Aquí comienza la historia del Rayo Vallecano, en la calle del Carmen número 28, casa de doña Prudencia Priego —en el centro de la imagen—. A la izquierda, su sobrina Prudencia y a la derecha sus hijos Juan Huerta, Julián Huerta —primer presidente de la historia del Rayo Vallecano, que era guardia civil— y Modesto Huerta. (© Foto: ARCHIVO FAMILIA HUERTA-PRIEGO / Vallecasweb.com)

Doña Prudencia era madre de Juan y Modesto, los benjamines de la familia, de 15 y 13 años respectivamente, a quienes cabe imaginar entusiastas promotores de la convocatoria. Juan, de hecho, fue elegido capitán del equipo, el primer capitán en la historia del Rayo Vallecano, y Modesto sería titular en el primer equipo de infantiles, formado también ese mismo año. Julián Huerta, el mayor de los hermanos solteros, de 27 años, fue designado presidente. Julián era guardia civil, en esos momentos con destino en la 2ª Comandancia del 26º Tercio Móvil en Madrid, pero tendría que dejar el cargo en 1926 tras sucesivos traslados a cuarteles distantes de la capital.

Julián Huerta Priego, primer presidente de la historia del Rayo Vallecano. Tenía 27 años cuando el Club se fundó.Julián Huerta Priego, primer presidente de la historia del Rayo Vallecano. Tenía 27 años cuando el Club se fundó.

En torno a una veintena más de jóvenes, incluidos varios que eran hermanos, acudieron igualmente ilusionados a la cita y son considerados también fundadores del Rayo Vallecano. Hablamos, entre otros, de los hermanos Rodríguez Salt (Francisco y Vicente), los Rodríguez Alzola (Andrés y Miguel), los Aguabella (José y Rafael), los González Rubio (Luis y Emilio), Ricardo Benavides, Feliciano Pizarro, Manuel Laureiro, Pascual Álvarez Grajero, Afelio Morchón, José Tardón, Nicolás Ruiz y Ángel Martínez “El Cafeto”. Varios de ellos serían presidentes de la entidad con el discurrir de los años.

Dos circunstancias sobresalieron en la histórica reunión: la extraordinaria juventud de los presentes y el predominio de residentes en la calle del Carmen. El nombre del club se le ocurrió a Luis González Rubio, que tenía 16 años y vivía en Carmen nº 1, entonces estudiante y en el futuro prestigioso médico. Los dos primeros términos del nombre fueron seguramente escogidos por influencias de la Agrupación Deportiva Ferroviaria, conocida como La Ferro, el equipo más popular del fútbol modesto madrileño.

Otras agrupaciones deportivas, expresión ligada al amateurismo que reinaba en la época, fueron las del Carmen (del barrio de ese nombre próximo a Las Ventas), Argüelles, Argumosa, Ciudad Lineal y Tranviaria. Lo de llamarse El Rayo (hasta después de la Guerra Civil con las dos iniciales en mayúsculas) fue una ocurrencia más original. Al menos en Madrid no existía entonces, que sepamos, ningún club con ese nombre. Años después surgirían varios, como uno con sede en el paseo de Extremadura y otro en la calle Miguel Ángel. El Rayo Cantabria, de Santander, en el que se formaría el mítico Paco Gento antes de fichar por el Real Madrid, nació en 1926.

Casa originaria donde se fundó el Rayo Vallecano el 29 de mayo de 1924. La imagen corresponde a los años 50 del pasado siglo y al fondo pueden apreciarse los bloques de viviendas de la colonia Erillas.Casa originaria donde se fundó el Rayo Vallecano el 29 de mayo de 1924. La imagen corresponde a los años 50 del pasado siglo y al fondo pueden apreciarse las viviendas de la colonia de Las Erillas.

En la reunión se redactaron unos estatutos muy básicos en los que se indicaba que todo jugador debía ser socio de la entidad y abonar una mensualidad de 30 céntimos para gastos de material. Cada uno tenía que pagarse, además, la indumentaria y las botas de juego. La Agrupación Deportiva El Rayo, como la mayoría de clubs españoles, no oficializó entonces su nacimiento; lo haría el 14 de julio de 1944 inscribiéndose en el Registro del Gobierno Civil de Madrid. Era presidente Ezequiel Huerta, otro de los hijos de doña Prudencia (impagable la deuda rayista con esta familia).

El uniforme adoptado consistía en camiseta y pantalón blanco y medias negras con unas vueltas blancas que los futbolistas, humildes trabajadores o estudiantes, tardarían mucho tiempo en tener. Las camisetas fueron enviadas desde Barcelona por el padre del jugador Ricardo Benavides. No se sabe la razón pero las mandó blancas; por eso el club, que no estaba para hacer ascos a regalo tan apreciable, aceptó uniformarse de ese color.

Miguel Rodríguez Alzola, que fue jugador y después presidente del Rayo Vallecano, en una de las escasas imágenes que existen del originario campo de Las Erillas, cuando aún se encontraba sin vallar.Miguel Rodríguez Alzola, que fue jugador y después presidente del Rayo Vallecano, en una de las escasas imágenes que existen del originario campo de Las Erillas, cuando aún se encontraba sin vallar.

De izquierda a derecha, los históricos futbolistas Tomás González Rubio, el guardameta Agustín Garrote, y Francisco González. Como dato curioso, puede apreciarse que cada uno de ellos lleva las medias de diferente color.De izquierda a derecha, los históricos futbolistas Tomás González Rubio, el guardameta Agustín Garrote, y Francisco González. Como dato curioso, puede apreciarse que cada uno de ellos lleva las medias de diferente color.

Doña Prudencia no sólo acogió a los fundadores del club, sino que además ofreció su casa para guardar el material y hacer de vestuarios y se hizo cargo de lavar ella misma la ropa. La ayudaba en estos menesteres una sobrina suya llamada también Prudencia. Su hogar fue, por tanto, la primera sede del Rayo Vallecano en la historia, como testimonia la prensa de la época. Incluso las reuniones de los socios se hacían en su casa. Todo el mundo hablaba de su bondad y de su enorme amor y sacrificio por El Rayo. Hada madrina del equipo, hada protectora, los jugadores, y los vallecanos en general, la veían como una madre...

Es difícil encontrar generosidad semejante, y más si tenemos en cuenta la situación económica que vivía la familia Huerta. Don Julián, el patriarca y marido de doña Prudencia, había fallecido en 1912, pocos años después de nacer Modesto, el menor de los once hijos del matrimonio. Su oficio en Vallecas, a donde había llegado tras residir en Vicálvaro, fue el de empedrador, dedicándose a colocar adoquines en las primeras calles que cubrieron la tierra y el fango que dominaban la zona. Al fallecer su marido, doña Prudencia se tuvo que poner a servir por las casas y la mayoría de sus hijos a trabajar en la importante fábrica de cemento y escayola que poseía Julio Chellini en la carretera de Valencia, hoy avenida de la Albufera, nº 69. La familia Huerta fue un ejemplo de superación (como hoy lo es el Rayo Vallecano).

El primer partido del equipo, disputado a finales de mayo o primeros de junio, fue contra el Club Numantino, club del que El Rayo se había nutrido de jugadores. Concluyó con el triunfo del conjunto de la calle del Carmen por 3 goles a 1. El Numantino pertenecía a una sociedad de recreo dedicada también a otras actividades, como la celebración de carreras de cross y de veladas teatrales. Su equipo de fútbol desapareció casi a continuación.

El 4 de junio de 1924, El Rayo se presentaba en sociedad con un anuncio publicado en el diario madrileño, de precioso nombre, La Libertad:

Primera referencia en prensa de la nueva Sociedad Agrupación Deportiva El Rayo. En la nota, que contiene algunos errores tipográficos, su capitán Juan Huerta se ofrece para jugar partidos contra equipos federados y no federados “a partir del próximo domingo”.Primera referencia en prensa de la nueva Sociedad Agrupación Deportiva El Rayo. En la nota, que contiene algunos errores tipográficos, su capitán Juan Huerta se ofrece para jugar partidos contra equipos federados y no federados “a partir del próximo domingo”.

Poco después, el domingo 27 de julio de ese año, el equipo inauguraba en el descampado de Arroyo del Olivar, a espaldas de la calle del Carmen, su primer campo, por cuyo alquiler pagaría 15 duros al año. Era conocido como campo del Rayo, aunque con el tiempo sería recordado como campo de Las Erillas. El Rayo venció ese día al Sporting Club Galileo por 1 a 0. La prensa dio cuenta del encuentro y facilitó la alineación del equipo vencedor:

El Rayo estrenó su campo con una victoria frente al Sporting Club Galileo, con gol del interior derecha Rodríguez.El Rayo estrenó su campo con una victoria frente al Sporting Club Galileo, con gol del interior derecha Rodríguez.

El terreno de juego era muy irregular y se asentaba sobre una explanada que había al final de una pendiente. Cada partido, los propios jugadores lo rodeaban de alambre para delimitar su contorno e impedir que los espectadores lo pisasen. Antes lo limpiaban de piedras. Las porterías eran de madera, desmontables para que no fueran robadas y ser así objeto de las llamas de alguna lumbre. Finalizados los encuentros, se llevaban a casa de doña Prudencia, siendo introducidas a través de una ventana.

El Rayo Vallecano, que nació como un equipo de calle, el equipo de la calle del Carmen, mantuvo desde el propio año 1924 unos vínculos tan estrechos con su entorno que pronto se convirtió en un conjunto muy popular y querido en todo Vallecas. Numerosas familias, generación tras generación, ligaron su pasión por el fútbol, cuando no sus vidas, a un club que, pese a su modestia y eterna falta de recursos económicos, se erigió con los años en el principal estandarte del barrio.

Un día histórico. El 6 de junio de 1976 se inaugura el Nuevo Estadio de Vallecas en un partido frente al Real Valladolid. En la imagen, Modesto Huerta, uno de aquellos jóvenes que el 29 de mayo de 1924 fundó la Agrupación Deportiva El Rayo, posa orgulloso con su nieto Julián Huerta Miranda antes del inicio del encuentro.Un día histórico. El 6 de junio de 1976 se inaugura el Nuevo Estadio de Vallecas en un partido frente al Real Valladolid. En la imagen, Modesto Huerta, uno de aquellos jóvenes que el 29 de mayo de 1924 fundó la Agrupación Deportiva El Rayo, posa orgulloso con su nieto Julián Huerta Miranda antes del inicio del encuentro.

Una de estas familias, vallecana y rayista hasta la médula, es la de don Rafael Sanjuán González, actual abonado nº 1 del club. El pasado 15 de mayo, la Plataforma de Peñas del Rayo Vallecano, en el primer día de sus aplaudidas III Jornadas del Rayismo, colocó una placa en la calle Puerto de Monasterio nº 8, lugar donde se fundó el Rayo Vallecano. El anfitrión del acto fue Julián Huerta Miranda, hijo de Modesto y nieto de doña Prudencia. Junto a celebridades de la historia del hoy famoso equipo franjirrojo, entre los que se encontraban, visiblemente emocionados, los míticos exjugadores Manolo Peñalva y Felines, destacaba la figura de don Rafael, de 90 años muy bien llevados.

Inauguración de una placa en la casa donde se fundó el Rayo Vallecano. A la derecha, Julián Huerta, nieto de doña Prudencia Priego; en el centro Rafael Sanjuán, abonado número 1 del Rayo Vallecano, y a su lado Rafael Garrido, abonado número 6 del Club de Vallecas. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)Inauguración de una placa en la casa donde se fundó el Rayo Vallecano. A la derecha, Julián Huerta, nieto de doña Prudencia Priego; en el centro Rafael Sanjuán, abonado número 1 del Rayo Vallecano, y a su lado Rafael Garrido, abonado número 6 del Club de Vallecas. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

Sebastián Rafael Sanjuán González, abonado número 1 del Rayo Vallecano. De familia de arraigada tradición rayista, es pariente de los fundadores del Club y lleva abonado ininterrumpidamente desde el 1 de septiembre de 1947. Nació el 20 de enero de 1924, por tanto ha cumplido 90 años, los mismos que el Club. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)Sebastián Rafael Sanjuán González, abonado número 1 del Rayo Vallecano. De familia de arraigada tradición rayista, es pariente de los fundadores del Club y lleva abonado ininterrumpidamente desde el 1 de septiembre de 1947. Nació el 20 de enero de 1924 y ha cumplido 90 años, los mismos que el Club. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

Nadie entre los presentes sabía que es muy probable que el abonado nº 1 del Rayo se tenga que dar de baja en el club. Nacido en Vallecas el 20 de enero de 1924, don Rafael Sanjuán, pariente lejano de los Huerta (llegó a vivir en la casa de doña Prudencia), es el último abonado nº 1 con más edad que el propio Rayo Vallecano. Pero debido a problemas de movilidad le es casi imposible acceder a su asiento en la tribuna baja de preferencia. En el último partido contra la Real Sociedad sufrió, además, una caída al abandonar el estadio que le ha dejado maltrecho. El club puede evitar que don Rafael nos deje huérfanos de su histórica presencia. Sus 67 años de socio fiel no pueden acabar de semejante modo; sería lamentable. El Rayo, conocedor ahora de su delicada salud, y como reconocimiento a su lealtad, podría facilitarle gratuitamente un asiento acorde a sus necesidades, distinción que contaría con el aplauso de la afición.

¡Don Rafael Sanjuán, que las 90 velas que soplamos hoy todos los rayistas las sienta también como propias por su reciente cumpleaños! ¡Y de regalo seguro que tendrá el lugar de honor que se merece en nuestro estadio!

Esto es el Rayo: desde 1924 una gran familia.

.NOTA DE VALLECASWEB:. Queremos agradecer al escritor Juan Jiménez Mancha —autor del libro "Los Orígenes del Rayo Vallecano. De equipo sin federar a Segunda División (1924-1956)"— que nos haya brindado este artículo especialmente hoy, día en que se cumple el 90 aniversario de la fundación de la Agrupación Deportiva El Rayo. Agradecimiento que hacemos extensivo a Julián Huerta Miranda, hijo y nieto de la familia "Huerta-Priego", tan ligada a la historia del Club de Vallecas, sin cuya colaboración habría sido imposible publicar esta información.

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Comentarios (5)

  • Dolores García

    Dolores García

    29 Mayo 2014 a las 07:43 |
    Un buen artículo escrito, sin duda, por un gran apasionado de la historia y del futbol.
  • María de los Angeles Urrutia

    María de los Angeles Urrutia

    29 Mayo 2014 a las 11:21 |
    Felicidades!!! Hoy es más que el cumpleaños de un club de fútbol, es la demostración que con esfuerzo y ganas los sueños se hacen realidad, como el de un grupo de chavales de barrio que con sus ilusiones han hecho posible 90 años de historia. Y Gracias a ti Juan por ayudarnos a conocerla.
  • un aficionado

    un aficionado

    30 Mayo 2014 a las 09:32 |
    Magnífico artículo. Esperamos que el autor siga escribiendo sobre estos y otros temas con similar calidad.
  • Edu ValleKantabro

    Edu ValleKantabro

    30 Mayo 2014 a las 11:23 |
    Increíble el articulo del 90 aniversario, se agradece para los que no pudimos comprar el libro.
  • Pedro

    Pedro

    14 Junio 2014 a las 22:03 |
    Preciosa la historia y los orígenes de nuestro equipo. No se podría entender Vallecas sin el Rayo y el Rayo sin Vallecas. Ambos son como dos gotas de agua, iguales y unidos para siempre por su trabajo, sacrificio y humildad.

    !Felicidades por el maravilloso articulo 90 Aniversario!

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