18 Julio 2022

Antonio Cosmen en el pregón de las Fiestas del Carmen: “Vallecas merece mucho la pena pero los vallecanos tenemos que creérnoslo”

Publicado en Actualidad

El cocinero fue elegido pregonero por unanimidad de todos los grupos políticos

Antonio Luquero | Vallecasweb
Antonio Cosmen, cocinero y propietario del Restaurante Cruz Blanca Vallecas, ha señalado durante el pregón que ha dado con motivo de las Fiestas del Carmen 2022 que “Vallecas es un barrio que a todo el mundo le suena pero que muy poca gente conoce”. Cosmen defendió la buena imagen de Vallecas y pidió a los vallecanos que se sientan orgullosos del lugar en el que viven.

El balcón de la Junta Municipal de Puente de Vallecas volvió a ser testigo, un año más, del pregón de las Fiestas del Carmen. La previa al acto estuvo amenizada por la Banda de Música de Vallecas y los bailes de los Chulapos de Puente de Vallecas. Borja Fanjul, concejal presidente de Puente de Vallecas, señaló que la elección de Cosmen como pregonero se había decidido “por unanimidad” de todos los grupos políticos.

Antonio Cosmen pronunció un pregón en el que no faltaron las referencias al pasado, incluidas las gastronómicas, pero también pidió a las vallecanas y vallecanos que se sientan orgullosos de Vallecas y que defiendan su imagen allá donde estén. A continuación les ofrecemos el pregón íntegro:

“¡Vallecanas, vallecanos!
Queridas amigas y amigos de Puente de Vallecas.

Es para mí un honor poder dirigirme a vosotros desde este balcón de la Junta Municipal de Puente de Vallecas, en el inicio de nuestras queridas y tradicionales Fiestas de la Virgen del Carmen.

Al igual que muchos de vosotros, yo llegué a Vallecas hace muchos años. Nací en el Puerto de Leitariegos, el pueblo más alto de Asturias, en el Concejo de Cangas del Narcea, donde también por cierto se celebran estos días las Fiestas de la Virgen del Carmen con su famosa Descarga de voladores, una fiesta pirotécnica espectacular.

Mi familia eran ganaderos y labradores, al decir ganaderos me refiero a sólo 8 ó 10 vacas nada más. Cuando nací mi padre era minero, ahí estaba el hombre trabajando el carbón. Siendo muy pequeño con 11años me quedé sin madre, por lo que cuando tenía sólo catorce me vine a trabajar a Madrid, donde ya estaban dos de mis hermanos.

Comencé a trabajar en una taberna andaluza en la Glorieta de Bilbao. Empecé haciendo de todo: desde fregar suelos, servicios y cacharros, hasta limpiar pescado y empezar a hacer cosas en la cocina, ayudando en la barra y fregando vasos, porque entonces se fregaba todo a mano y con agua fría, así es como se comenzaba entonces.

Estando trabajando siempre en el Centro de Madrid, hace más de cuarenta años que me vine a vivir a Vallecas, a un piso que compró mi hermano aquí, en Nueva Numancia. Desde entonces siempre he vivido en Vallecas, mi barrio.

Cuando llegué a Vallecas me gustó el trato que vi en las personas: cercano, cariñoso, de gente muy trabajadora, con calles siempre en ebullición y vecinos que madrugaban a diario para ir al trabajo, personas que se paraban en la calle o en la puerta de sus casas para hablar con sus vecinos y las clásicas tertulias con las sillas en la acera en verano.

Tengo que decir (y me duele recordarlo porque me temo que a algunos os habrá pasado como a mí) que en ocasiones, hace años, cuando terminaba de trabajar en el Centro de Madrid y parabas un taxi para venir a Vallecas, me encontraba dificultades porque algunos taxistas no me querían traer aquí. Y sobre esto tengo que decir dos cosas:

La primera es que afortunadamente todo esto ha cambiado en general y para mejor.

La segunda es que tanto desde Cruz Blanca Vallecas como yo de manera personal, siempre hemos luchado contra ese “estigma” que tiene Vallecas y que no se ajusta en absoluto a la realidad.

En 1984 inauguré con mi hermano Tito un restaurante en Antón Martín, allí aprendí a hacer el cocido madrileño con Raquel, una cocinera segoviana. A día de hoy aún tengo clientes de aquellos tiempos. ¡Quién me iba a decir que me iban a cundir tanto los garbanzos! Después me hice cargo de un negocio familiar que terminó como el rosario de la Aurora.

La Banda de Música de Vallecas amenizó, como viene siendo tradicional, la previa a la lectura del pregón. (© Foto: VALLECASWEB.COM)
La Banda de Música de Vallecas amenizó, como viene siendo tradicional, la previa a la lectura del pregón. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

Los Chulapos de Puente de Vallecas bailaron frente a la Junta Municipal. (© Foto: VALLECASWEB.COM)
Los Chulapos de Puente de Vallecas bailaron frente a la Junta Municipal. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

A continuación me vine a Vallecas con un amigo que había comprado el Bar Jorge, un bar de toda la vida junto a la Plaza del Cine París. Dos años después hicimos la reforma de Cruz Blanca, a la que querían dar el nombre de la calle: Carlos Martín Álvarez. Pero yo quería llamarle Cruz Blanca Vallecas y así fue: quería que figurara el nombre de Vallecas porque me siento muy orgulloso de mi barrio.

Empezamos a trabajar como cervecería ofreciendo la cocina de siempre. En 2013 compré la empresa y pasamos de 11 trabajadores a los 22 que somos en la actualidad.

Cuando en noviembre de 2015 nos concedieron el Premio Nacional de Hostelería en Categoría Internacional por la difusión de nuestra cocina fuera de nuestras fronteras, un premio que recogimos en Valencia junto a los cocineros y empresarios más reconocidos del país, dije estas palabras:

“El premio que nos han dado es positivo para nosotros a nivel comercial pero también para nuestro barrio, Vallecas, porque siempre es bueno que la 'marca Vallecas' suene a nivel nacional e internacional por cosas buenas como ésta. Vallecas es un barrio que merece la pena ser visitado y conocido”.

Yo siempre digo que “Vallecas es un barrio que a todo el mundo le suena, pero que muy poca gente conoce”. Por eso os digo, os pido, que allá donde estéis, allá donde vayáis, defendáis siempre el nombre de Vallecas. Porque es evidente que si no lo defendemos los vallecanos, nadie lo va a hacer por nosotros.

En un día como hoy, quiero agradecer a mi familia. También a las personas que me han ayudado y me siguen ayudando como en un principio de mi vida laboral en Vallecas mi amigo Tomás, y a las personas que durante la pandemia me han brindado apoyo económico.

También tengo mucho que agradecer a mi equipo, a la gente que trabaja conmigo en Cruz Blanca Vallecas, porque sin ellos no soy nadie. Somos un equipo y de verdad os digo que trabajan con una dedicación impresionante.

Otro agradecimiento para los medios de comunicación que han sido muy generosos con nosotros, haciendo que Cruz Blanca Vallecas sea hoy un restaurante conocido en medio mundo. Difundiendo, según ellos, nuestro buen hacer. A todos les he comentado la grandeza de Vallecas en todos los sentidos. Y muchas veces les recuerdo cómo se tratan las noticias cuando suceden aquí y cómo lo hacen cuando suceden en otras calles de Madrid.

Siempre les hago constar que todo Vallecas es más grande que muchas ciudades españolas. Actualmente, seríamos la décima ciudad de España en población, con 350.000 habitantes, similar a la que tiene una gran capital como Bilbao. Por eso, lo que aquí sucede tiene tanta relevancia como lo que puede pasar en cualquier ciudad de gran tamaño.

Con respecto de la cocina tradicional, en Cruz Blanca Vallecas hemos recuperado un plato muy típico de Vallecas: el conejo al ajillo.

Algunos lo sabréis pero otros a lo mejor no. Por donde ahora pasan la M-30 y el scalextric del Puente de Vallecas, a principios del siglo XX había numerosos merenderos situados en las orillas del arroyo Abroñigal donde las gentes de Madrid y de Vallecas venían los fines de semana a pasar el día. En esos merenderos se ofrecía un plato típico: el conejo al ajillo. Una comida modesta, pero muy sana y suculenta.

A platos así me refiero cuando hablo de recuperar no sólo la comida tradicional de Madrid, como puede ser el cocido, sino también la de Vallecas como el conejo al ajillo.

Representantes de todos los grupos políticos de Puente de Vallecas, con Antonio Cosmen. El pregonero de este año se eligió por unanimidad de todos ellos. (© Foto: VALLECASWEB.COM)
Representantes de todos los grupos políticos de Puente de Vallecas, con Antonio Cosmen. El pregonero se eligió por unanimidad de todos ellos. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

Tras el pregón, la Junta Municipal hizo a entrega a Cosmen de una placa en la que se destaca “su contribución y compromiso con la buena imagen de Puente de Vallecas. (© Foto: VALLECASWEB.COM)
Tras el pregón, la Junta Municipal hizo a entrega a Cosmen de una placa en la que se destaca “su contribución y compromiso con la buena imagen de Puente de Vallecas. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

P
ero nuestro apoyo a Vallecas no está sólo en la gastronomía. Soy de los que cree firmemente que un negocio, sea del tipo que sea, debe formar parte del tejido social y ayudar a los vecinos, que no deben ser para nosotros sólo clientes.

En Cruz Blanca Vallecas hemos colaborado en recogidas de alimentos para personas necesitadas del barrio, con asociaciones de vecinos de Puente de Vallecas, con la parroquia, con las peñas del Rayo Vallecano, con el comedor que el Padre Ángel tiene en El Pozo. Durante el cierre por la pandemia nuestras ollas y nuestros garbanzos se sirvieron en Mercamadrid a los camioneros que venían cargados con alimentos y que no tenían un plato que llevarse a la boca.

A nivel cultural llevamos muchos años colaborando con Vallecas Todo Cultura, una asociación que promueve el fomento de la lectura entre las niñas y niños de Vallecas, para que aprendan a escribir relatos, estudien y se formen.

Hemos organizado tertulias y hemos recibido a familiares y descendientes de personalidades tan conocidas como Carlos Martín Álvarez y Amós Acero, el que fuera alcalde de Vallecas. También a actores, escritores, políticos de toda clase y condición, cantantes, periodistas, deportistas…

Desde que llegué a Vallecas hace más de cuarenta años hasta hoy Vallecas ha cambiado mucho y para bien. Y no sólo en infraestructuras, en calles, en aceras... La sociedad ha evolucionado mucho. La gente está mucho más preparada, muy escolarizada, hemos mejorado a nivel cultural.

Este barrio vale mucho. Me gusta ver cómo los niños y las niñas luchan por ir a estudiar al colegio, la ilusión de los vecinos por mantener nuestras tradiciones, como las Fiestas del Carmen que celebramos en este mes de julio. ¡Vallecas merece mucho la pena, pero los vallecanos tenemos que creérnoslo!

Ahora hay un Vallecas más diverso, donde hay más nacionalidades y se hablan más lenguas y eso es bueno. Ha llegado gente y ha aumentado la natalidad, con una convivencia en la inmensa mayoría de los casos fenomenal.

Para finalizar os pido a vosotros, vallecanas y vallecanos, que disfrutéis de estas Fiestas de la Virgen de Carmen y de La Karmela con alegría como siempre lo hemos hecho. Que lo hagáis en concordia y teniendo cuidado con excesos que puedan perjudicar a vuestra salud. Los malos hábitos, dejadlos para otros.

Os pido también que tengáis un recuerdo para todos aquellos que ya no están y que lo paséis bien también por ellos.

¡Y nunca olvidéis que vivimos en el mejor barrio de Europa y el más solidario del Mundo!

¡VIVAN LAS FIESTAS DE LA VIRGEN DEL CARMEN!
¡VIVAN LAS VALLECANAS Y LOS VALLECANOS!
¡VIVA VALLECAS!

(*) En la imagen que abre esta información, Antonio Cosmen durante la lectura del pregón de las Fiestas del Carmen 2022 en Puente de Vallecas. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)