Redacción / Vallecasweb
Con treinta y cuatro grados a la sombra y un sol abrasador, alrededor de 8.000 personas han participado, un año más, de la popular Batalla Naval de Vallecas. En esta ocasión, los corsarios, brunetes y navegantes de secano han salido a la calle bajo el lema “¡Mójate, que nos ahogan. No es un rescate, es una aguadilla!”.

Son ya treinta y una las ediciones en las que los vecinos de Vallecas cambian su vestimenta habitual por bañadores, chanclas, cubos y pistolas de agua, y al grito de “¡Vallekas Puerto de Mar!” se lanzan al “abordaje” del vecino seco. Nadie escapa al chapuzón y nadie puede resistir la tentación de mojar al prójimo en esta batalla incruenta en la que el presupuesto se ha reducido este año de los 5.000 a los 1.500 euros.
La crisis redujo el dinero pero lo que no ha escaseado, afortunadamente, es el agua. Más de 30.000 litros han servido para que niños y mayores disfrutaran de una fiesta que atrae cada año a un mayor número de participantes. Además, y gracias al evento, los asistentes han podido escuchar el pregón en boca de Lele Laína y José Luis Jiménez, integrantes de los míticos grupos Asfalto y Topo, que resaltaron el carácter reivindicativo de la Batalla Naval vallecana.