17 Febrero 2019

Calle de Carlos Martín Álvarez

Publicado en Reportajes

Historia de los lugares públicos de Vallecas

Antonio Luquero | Vallecasweb
Desde su inicio en la calle del Arroyo del Olivar hasta su desembocadura en la Avenida de San Diego, la calle de Carlos Martín Álvarez une los barrios de Portazgo y San Diego convirtiéndose en una de las principales arterias del Puente de Vallecas. Sus 850 metros de longitud permiten hacer una fotografía perfecta de una de las zonas más singulares del distrito. Sin embargo, que el nombre de Carlos Martín Álvarez sea muy habitual en el día a día de los vecinos de Vallecas no significa que sepan realmente quién fue.



Para conocer más sobre Carlos Martín Álvarez nos reunimos en Vallecas con su nieta, Mercedes Martín-Artajo, justo en la misma calle que lleva el nombre de su abuelo. En la conversación nos acompaña el cura Enrique de Castro, conocido como el cura 'rojo' de la Parroquia de San Carlos Borromeo en Entrevías y amigo personal de Mercedes.

Carlos Martín Álvarez nació en Madrid en 1873 y cursó estudios de Leyes, ejerciendo la abogacía hasta que cumplió los 82 años. Entre 1927 y 1930 fue nombrado gobernador civil de Madrid durante la dictadura del general Miguel Primo de Rivera, aunque con anterioridad había ejercido como teniente de alcalde del Ayuntamiento de Madrid. Durante la II República fue designado vocal del Tribunal de Garantías Constitucionales por los partidos de derechas. Al estallar la Guerra Civil, fue detenido y trasladado a la Cárcel Modelo, siendo liberado tras el asalto a la prisión.

Finalizada la guerra, dedicó una buena parte de su actividad a la Acción Católica y fue secretario de la primera Junta Nacional que presidió el Marqués de Comillas. Perteneció al Consejo de Dirección del Instituto de Reformas Sociales durante 14 años, y luego al Consejo de Trabajo y a la Junta de Crédito Agrícola. También fue uno de los impulsores de “La Constructora Benéfica” de Casas Baratas de Madrid, cargo que ejerció hasta 1956 y que le terminaría vinculando con Vallecas.

“Mi abuelo Carlos Martín Álvarez compró un solar con su dinero para hacer casas para obreros en Vallecas. Las primeras que se hicieron en Madrid las impulsó él, para ello consiguió ayudas del Monte Pío para poder construir las casas y las alquilaba a un precio aproximado de una peseta, una cosa simbólica. Las casitas eran pequeñas y baratas y con el tiempo se fueron vendiendo a los propios obreros a un precio asequible. Mi abuelo cobraba ese precio simbólico por el alquiler de las viviendas para dar dignidad y que no se considerara una limosna. Con el tiempo estas casitas, que eran en planta baja, desaparecieron y se hicieron bloques de viviendas. Creemos que ese fue el motivo por el que se puso su nombre a esta calle en Vallecas, porque todo esto sucedió aquí”, nos indica Mercedes Martín-Artajo justo al lado del lugar en el que su abuelo decidió construir estas viviendas.

Según Mercedes, “Carlos Martín Álvarez siempre tuvo mucha inquietud social, era una persona muy vinculada a la Acción Católica y a la parte más abierta de la iglesia. El papa Pío XII le concedió la Gran Cruz de la Orden de San Silvestre por su apoyo. Recuerdo de él su especial interés en inculcarnos el cariño a la gente, a nuestro entorno, siempre preocupado porque los que menos tuvieran pudieran subir, intentar acortar distancias”.

Carlos Martín Álvarez se casó con Felicia Artajo y Achúcarro, nacida en Bilbao, y prima carnal del padre del afamado pianista Joaquín Achúcarro. Se conocieron en Bilbao en un viaje que Carlos Martín Álvarez realizó a la capital vizcaína con motivo de un trabajo relacionado con su bufete de abogados en Madrid. Del matrimonio nacieron once hijos de los cuales dos murieron siendo muy pequeños. De entre sus hijos, Alberto Martín Artajo llegó a ser ministro de Asuntos Exteriores durante la dictadura del general Franco, otro se hizo jesuita y la hija mayor monja del Sagrado Corazón. Carlos Martín Álvarez tuvo 43 nietos.

Carlos Martín Álvarez y Felicia Artajo y Achúcarro con nueve de sus once hijos. La foto está datada hacia 1923. (© Foto: ARCHIVO FAMILIA MARTÍN-ARTAJO / Vallecasweb.com)Carlos Martín Álvarez y Felicia Artajo y Achúcarro con nueve de sus once hijos. La foto está datada hacia 1923. (© Foto: ARCHIVO FAMILIA MARTÍN-ARTAJO / Vallecasweb.com)

Ataviado con el uniforme de gobernador civil de Madrid, cargo que ejerció entre 1927 y 1930. (© Foto: ARCHIVO FAMILIA MARTÍN-ARTAJO / Vallecasweb.com)Ataviado con el uniforme de gobernador civil de Madrid, cargo que ejerció entre 1927 y 1930. (© Foto: ARCHIVO FAMILIA MARTÍN-ARTAJO / Vallecasweb.com)

Carlos Martín Álvarez recibiendo del nuncio del papa Pío XII la Gran Cruz de la Orden de San Silvestre por sus servicios a la Iglesia. (© Foto: ARCHIVO FAMILIA MARTÍN-ARTAJO / Vallecasweb.com)Carlos Martín Álvarez recibiendo del nuncio del papa Pío XII la Gran Cruz de la Orden de San Silvestre por sus servicios a la Iglesia. (© Foto: ARCHIVO FAMILIA MARTÍN-ARTAJO / Vallecasweb.com)

Foto familiar de Carlos Martín Álvarez con su esposa, sus hijos y nietos, tomada en 1949 frente al Colegio del Sagrado Corazón de Rosales con motivo de sus bodas de oro. (© Foto: ARCHIVO FAMILIA MARTÍN-ARTAJO / Vallecasweb.com)Foto familiar de Carlos Martín Álvarez con su esposa, sus hijos y nietos, tomada en 1949 frente al Colegio del Sagrado Corazón de Rosales con motivo de sus bodas de oro. (© Foto: ARCHIVO FAMILIA MARTÍN-ARTAJO / Vallecasweb.com)

Aparte de la actuación de Carlos Martín Álvarez en el barrio de San Diego como promotor de la “La Constructora Benéfica”, la relación de la familia con Vallecas fue prácticamente nula durante muchos años, como reconoce Mercedes Martín-Artajo: “Nuestra familia no tuvo en principio una relación especial con Vallecas. Curiosamente yo, cuando era jovencita, pertenecía a un grupo de chicas católicas que se llamaban Las Javerianas que me trajeron con 16 y 17 años a enseñar a leer a las mujeres de Vallecas; hablo de los años 50 y 60. También fui enfermera de Cruz Roja y enseñábamos nociones de higiene para los niños”.

“Pero tras muchos años de vivir fuera porque mi marido era marino, volví a Madrid y tuve la enorme suerte de conocer al sacerdote Enrique de Castro, de la Parroquia San Carlos Borromeo, y a todo su entorno. Empecé a venir a Entrevías hace veinte años y ya no he dejado de hacerlo, ha sido como una adicción. Ya sé que dicen que es un cura 'rojo', pero es que yo me he hecho un poco rojilla también”, asegura entre risas mientras coge del brazo a Enrique de Castro. “Sí, porque la cuestión social te lleva a ello indefectiblemente. Yo conozco a mucha gente y he estado en muchos sitios, pero donde de verdad estoy a gusto es aquí en Vallecas, con este grupo de gente magnífica”, señala Mercedes.

Desde el punto de vista personal, Mercedes recuerda a su abuelo como un hombre alto, espigado y de buen aspecto: “Tenía un campo en Guadalajara con un molino en La Alcarria. En cuanto podía se marchaba para allí y pasamos muchos veranos en el que llamábamos 'Molino del chocolatero'. Yo le recuerdo muy cariñoso, aunque en aquella época los señores mayores y los niños manteníamos una cierta distancia. Cuando se acercaba a acariciarme con esos enormes bigotazos me hacía gracia, era una especie de plumero que te pasaba por la cara. Era una buena persona”.

La nieta de Carlos Martín Álvarez, Mercedes Martín-Artajo, acompañada por el cura Enrique de Castro, habló con Vallecasweb en un restaurante situado en la calle que lleva el nombre de su abuelo. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)La nieta de Carlos Martín Álvarez, Mercedes Martín-Artajo, acompañada por el cura Enrique de Castro, hablando con Vallecasweb en un restaurante situado en la calle que lleva el nombre de su abuelo. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

Carlos Martín Álvarez falleció el 12 de agosto de 1959 en el Sanatorio del Rosario a causa de las heridas sufridas tras una caída en su finca de Guadalajara diez días antes. Está enterrado en el cementerio de San Justo junto a su mujer, Felicia Artajo y Achúcarro.

La decisión de dedicar una calle a Carlos Martín Álvarez en Vallecas se aprobó, por Acuerdo Municipal del Ayuntamiento de Madrid, el 27 de abril de 1955. La vía adoptó el nombre de Travesía de Carlos Martín Álvarez, situada entre los barrios de San Diego y las Palomeras Bajas. En la zona se proyectó hacer una calle de mayor porte cuyo nombre sería el de Gran Vía de Palomeras, pero el proyecto no llegaría a ejecutarse. Tras la urbanización y ampliación de la calle, finalmente se cambió la denominación de travesía por el actual de “Calle de Carlos Martín Álvarez”.

(*) En la imagen que abre esta información, Carlos Martín Álvarez fue teniente de alcalde del Ayuntamiento de Madrid y tiene una calle con su nombre en el barrio de San Diego del Puente de Vallecas. (© Foto: ARCHIVO FAMILIA MARTÍN-ARTAJO / Vallecasweb.com)

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Comentarios (1)

  • Amelia Saco Ossorio

    Amelia Saco Ossorio

    19 Febrero 2019 a las 19:49 |
    Qué artículo tan interesante! Al menos para los vallecanos.

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